La app de Todos contra 1: éxito en descargas, fracaso en ejecución
Hace unos días RTVE ha lanzado un nuevo concurso llamado Todos contra 1, que mezcla un poco dicho formato televisivo con guiños al clásico ¿Qué Apostamos? y con toda esa ola que hubo hace unos años de apps de concurso en directo, como HQ Trivia, Q12 o Quizers.
En Todos contra 1 la gente también puede jugar desde sus casas a través del teléfono móvil. Solo tienen que bajarse la app correspondiente e ir contestando preguntas en paralelo a la emisión, así como superando retos.
Todas las preguntas cuentan con una solución numérica. Así, hay una ruleta que se encuentra en la aplicación para responderlas, marcando el número exacto. Los concursantes móviles aspiran a un premio de 100.000 euros.
Obviamente, este suculento botín ha hecho que muchos televidentes españoles procedan a bajarse la app de Todos contra 1 en sus smartphones. En unos pocos días la aplicación ha acumulado más de 50.000 instalaciones en Google Play. De hecho, ahora mismo es la más popular de la lista de apps gratuitas de la tienda, superando incluso a Mi Carpeta Ciudadana y ecommerce muy utilizados en este momento, como Shein o Miravia.
Un concurso basado en una app llena de fallos
Pese a que las cifras de audiencia del concurso en su estreno no han sido malas -y las críticas parece que tampoco lo son- RTVE se ha pegado un buen batacazo en cuanto a soporte tecnológico. Solo hay que echar un ojo a las reseñas negativas que han volcado sus usuarios en el market de Android para y a su baja nota media (un 1,7 sobre 5).
Aquellos que se han aventurado a instalar la aplicación para tratar de concursar con sus móviles se lamentan de que se quedaba pillada en la página de inicio, de que se cerraba sola o de que el correo con un código de verificación necesario para participar nunca les ha llegado. De hecho, hay varios que indican que han probado desde distintos correos y dispositivos, con resultados infructuosos.
De esta forma, la herramienta se ha quedado más bien en un ‘uno contra todos’ que otra cosa, ya que miles de españoles no han podido participar por estas trabas. Y esto es algo que el ente público, considerando que el programa se sustenta en la tecnología, debería haber tenido muy bien probado y pulido para que no ocurriera lo que ha pasado.
Esperemos que para la retransmisión del segundo episodio de Todos contra uno RTVE haya corregido todos estos errores técnicos. Si no es así, la verdad es que no tiene ningún sentido mantener en antena un concurso de TV cuya gracia se basa en el funcionamiento de una app… que no funciona.
Alberto Payo
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