Dos de cada cinco adultos en EE.UU ya utilizan apps de salud
La pandemia ha sido un claro impulso para las apps relacionadas con el ámbito de la salud y de la medicina. De hecho, el COVID-19 y sus restricciones ha abierto la puerta a que muchos servicios pasen a estar disponibles en aplicaciones y dispositivos móviles.
Obviamente, esta disponibilidad no debe sustituir a los servicios sanitarios presenciales, sino complementarlos y ‘empoderar’ a los consumidores para que puedan acceder a su información sanitaria con más facilidad.
La firma de inteligencia comercial Morning ha realizado un análisis de las apps de salud durante este 2023. Una de sus principales conclusiones es que ya hay dos de cada cinco americanos que usa herramientas de este tipo. Esto supone un aumento de 6 puntos porcentuales respecto a 2018.
En cuanto a la proporción de estadounidenses que utiliza un dispositivo portátil para monitorizar algunos aspectos de su estado físico o salud, es de un 35%, lo que supone un aumento de 8 puntos en el último lustro.
“Los últimos cinco años han sido muy emocionantes. Creo que los próximos cinco serán potencialmente aún más emocionantes y transformadores a medida que la innovación continúa evolucionando en casi todas las áreas de la atención médica”, explica Scott Whitaker, CEO de la firma de dispositivos médicos AdvaMed.
“La combinación de la fascinación de los consumidores con la tecnología y el reconocimiento del valor agregado está impulsando enormemente el uso”, insiste.
Los wearables están un poco a la zaga de la tendencia de las aplicaciones. Casi uno de cada cuatro no usuarios dijo que el coste de los dispositivos fue la razón principal por la que no compraron uno.
Uso prácticamente diario
En cuanto a la frecuencia de uso la mitad las utilizaría al día. Hay un 27% que las abre varias veces por jornada y un 23% que las usa una sola vez cada día. Un 18% las consulta unas pocas ocasiones por semana.
Las motivaciones difieren, pero el 75 % de los usuarios dijeron que se sirven de ellas para controlar el estado físico y el ejercicio, mientras que el 48 % realiza un seguimiento de su sueño y el 46 % controla el peso mediante dichas apps.
En cuarto lugar están las dietas o el contador de calorías (41%) y en quinto la presión sanguínea (36%). La gestión de la medicación y la salud mental están empatadas en el siguiente escalafón (con un 23% de adopción en ambos casos).
Alberto Payo
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