La importancia de la seguridad en las aplicaciones para la protección de datos

En la actualidad, así como en el futuro previsible, el uso de aplicaciones móviles está tan expandido que en la gran mayoría de las industrias las empresas apuestan por el desarrollo de sus propias aplicaciones a la hora de ofrecer soluciones de todo tipo a sus clientes.

Mientras que el enfoque suele ponerse en la usabilidad de las aplicaciones, en aspectos como la experiencia de uso, la interfaz y la capacidad para ofrecer, de manera eficiente, las soluciones que dan razón de ser a cada aplicación, un aspecto muchas veces relegado es el de la seguridad. Sin embargo, se trata de uno de los más importantes.

¿Qué es la seguridad en las aplicaciones?

La seguridad en las aplicaciones hace referencia a las medidas de seguridad adoptadas e implementadas a lo largo del proceso constructivo de una app, así como durante su vida útil. Su importancia reside en reducir la vulnerabilidad de las aplicaciones para proteger, principalmente, los datos de los usuarios.

A nivel de usuario, incluso si desconozco siquiera cuál es mi IP, me interesa saber que mis datos están protegidos. Las aplicaciones pueden ser puertas de acceso a los dispositivos en los que están instaladas, dispositivos repletos de información sensible; además, claro, de los datos mismos de la aplicación.

Esto es especialmente relevante para aplicaciones comerciales o financieras, en las que entran en juego datos relacionados con cuentas bancarias, operaciones de compra y venta, etc.

La importancia de la seguridad en las aplicaciones

En otras palabras, garantizar la seguridad en las aplicaciones es fundamental para proteger los datos de los usuarios, reduciendo el riesgo de ciberataques que puedan dañar irremediablemente la reputación de la empresa, así como la confianza de los clientes.

Además de los datos de los clientes, lo que se pone en riesgo es, también, la funcionalidad, la eficiencia y la integridad de las aplicaciones mismas.

Una de las prácticas más extendidas en este sentido es realizar pruebas de penetración con regularidad. Estas pruebas apuntan a encontrar vulnerabilidades en las aplicaciones que puedan ser explotadas por potenciales atacantes, con el fin de solucionarlas de antemano.

Otros aspectos a considerar para mejorar la seguridad de las aplicaciones son las medidas de autentificación de los usuarios, los protocolos de encriptación y el control de vulnerabilidades.

En definitiva, los beneficios para las empresas de enfocar tiempo y capital en la seguridad de las aplicaciones a todo lo largo del proceso de desarrollo y del despliegue de estas van desde una mejor imagen de marca y una mayor confianza por parte de usuarios y clientes, hasta una reducción de riesgos.

Al final, se trata de una inversión más que de un gasto, ya que una aplicación segura ahorrará, a la larga, mucho más tiempo y capital (y dolores de cabeza) de los que conllevará la implementación de medidas de seguridad.