Avast Premium Security: Esto ya no es lo que era (por fortuna)

Fernando Nieto | 18 marzo, 2021 | 0 comentarios

Debo admitir una cosa: cuando me propusieron usar para, posteriormente, analizar un antivirus, un escalofrío tenso me recorrió el lomo. Fue raro. Era como si una parte de mi volviera a los fríos y desoladores dos mil. Unos años turbios de la informática e Internet, donde la sensación de que a cada paso te esperaba un problema y que con cada decisión corrías un riesgo extremo de ser infectado por un virus que acabaría fulminantemente con tu preciado PC.

Y he aquí el primer dato revelador: estoy probando una copia de este antivirus en PC. Un buen cacharro que se hace accesible a este humilde usuario gracias a Windows 10 (en su versión 20H2).

Y, por supuesto, de medio lado que estés un poco en la pomada, tendrás otro dato relevante, porque sabrás que Windows viene equipado con el celebérrimo Windows Defender que, debo reconocer, era la única opción de seguridad que contemplaba hasta ahora. Posiblemente, tú también.

La informática no acompañaba

En aquellos años donde todo era tan distinto, todos sabremos reconocer que los antivirus eran tan necesarios como invasivos. Eran programas pesados e intrusivos, que conseguían sacar tu peor lado cuando observabas como restaban mucha de la poca potencia que, por aquel entonces, nos brindaban nuestros humildes ordenadores.

Eran unos tiempos donde entiendo que estas empresas de seguridad, tenían que lidiar constantemente entre ser realmente seguras y, al mismo tiempo, no ser una carga insoportable. Y lo cierto es que pocas lo conseguían, y las que lo hacían era en detrimento de la seguridad. Era entonces cuando se apelaba a las buenas prácticas.

Pero todo ha cambiado

En primer lugar, nuestros ordenadores. La gigantesca evolución de nuestros ordenadores hacia máquinas realmente poderosas, ha facilitado mucho que determinados procesos no estrangulen tus recursos. En segundo lugar, nuestras conexiones a la red: infinitamente mejores y más eficaces que en aquella época. Y, precisamente gracias al anterior punto, otro cambio es la capacidad de estas empresas de software de ejecutar muchas de sus necesidades en la nube.

En último lugar y no por ello menos importante: nuestras prácticas. Cualquiera que haya vivido esa época será plenamente consciente de que no usamos Internet de la misma manera. Ni de lejos. Aquella apelación a las “buenas prácticas” era fundamentalmente “cuidadito con las páginas que visitas para descargar según qué cosas”.

Como si no llevara nada

Si te preocupaba como a mi, te diré: es como si no llevaras nada. Avast Premium Security está ahí, haciendo su trabajo, pero tú no lo sabrás ni lo notarás. La carga del sistema que hace es extremadamente baja. Como mucho, sabrás de su existencia por alguna notificación.

La instalación y primeros pasos

Lo primero que te encontrarás a ejecutar el instalador es todo un clásico (para mal): dos mini botones en la parte inferior activados por defecto que te llevarían a instalar un navegador de la empresa y convertirlo en predeterminado del sistema si no hubieras leído esto y estuvieras al loro. No me gustan estas prácticas. Si quieres ofrecerme algo, hazlo de forma transparente, no marques las casillas por mi.

Avast Premium Security: Esto ya no es lo que era (por fortuna)

Lo siguiente será una enorme lista donde deberás elegir qué servicios de seguridad quieres incluir en tu antivirus. Elige bien.

Avast Premium Security: Esto ya no es lo que era (por fortuna)

Una vez termines todo el proceso de instalación, entrarás en una pantalla donde Avast hará unas primeras comprobaciones. Lo llaman “Análisis Inteligente”. Aquí abajo podrás ver las que, según lo elegido en la instalación, me hizo a mi.

Me detengo en esta captura, ya que me pareció realmente interesante: un análisis de todas mis aplicaciones para ver si están actualizadas a su última versión. Un trabajo que hace muy bien y totalmente transparente.

Avast Premium Security: Esto ya no es lo que era (por fortuna)

Un último paso de este análisis, será el llamado “problemas de rendimiento”. Te analizará tu PC y encontrará archivos no deseados que puedes liberar, elementos del registro dañados o programas que ralentizan tu PC. Bien, no te hagas ilusiones, no está incluido en lo que has pagado.

Cuando le des a “Resolver Todo” te llevará a una oferta para comprar Avast Cleanup Premium que hace posible todo esto. Esto tampoco me gusta: no me pongas un caramelo en la boca y luego me pidas dinero para poder seguir comiéndolo.

Avast Premium Security: Esto ya no es lo que era (por fortuna)

Pero, es que además de hacer lo anterior, te lo repetirá por si acaso, con una ventana de esas con mensajes de buen rollo que no hacen más que reafirmarme en que no me gustan estas prácticas. Avast, si he dicho que no, es que no.

Avast Premium Security: Esto ya no es lo que era (por fortuna)

Por desgracia, no serán las dos últimas veces que pases por ese trámite, pues hay otras herramientas que comprar y te aparecerán bien dentro del programa, bien como notificación, como si pudieras ejecutarlas sin pasar por caja. En fin, supongo que hay cosas que nunca cambian.

A partir de aquí, una interfaz muy limpia te dará acceso a todo tu ecosistema de seguridad. Distintas herramientas muy útiles (e incluídas) organizadas en cuatro pestañas laterales con las que podrás hacer distintas cosas, como estas:

Análisis de virus
Baúl de virus, para consultar tus amenazas bloqueadas
Inspector de Wi-Fi, para encontrar problemas en tu red
Sandbox, para probar archivos virtualmente de forma segura
Cortafuegos
Escudo de ransomware, para aislar determinadas carpetas sensibles
Escudo de webcam, para que nada no deseado acceda a ella
Destructor de datos

Avast Premium Security: Esto ya no es lo que era (por fortuna)

Y algún otro más.

Avast Premium Security: Esto ya no es lo que era (por fortuna)

Conclusiones

Avast Premium Security ha superado mis expectativas. Venía con miedo y me llevo una grata sorpresa por cómo funciona y por lo transparente de su protección (a excepción de lo que os comentaba líneas arriba).

En el primer gran análisis que ejecuté detectó un malware que Defender no supo encontrar previamente y, a partir de ahí, ningún otro problema.

Como usuario básico y con Windows 10, jamás me habría imaginado con otra solución de seguridad que no fuera la que trae incluida Microsoft, pero este Avast ha conseguido hacerme dudar sobre si debería prestar más atención a este apartado y desembolsar algo de dinero por este servicio.

Si eres un usuario más avanzado o tu equipo es de uso común, seguramente ya te habías planteado o tendrías antivirus de terceros instalado. La decisión sobre si te merecería la pena, obviamente, es sólo tuya.