Adiós a Microsoft Lens, un imprescindible del escaneo móvil

Hoy, 15 de diciembre de 2025, Microsoft Lens dice definitivamente adiós. La aplicación de escaneo de documentos para móviles deja de funcionar tras un proceso de retirada anunciado este verano. Con su cierre se va una de esas herramientas discretas pero enormemente útiles que muchos usuarios tenían siempre a mano sin hacer ruido, pero que resolvía problemas cotidianos con una eficacia envidiable.
La historia de Microsoft Lens comienza en 2015 bajo otro nombre: Office Lens. En sus orígenes fue una app pensada para el ecosistema Windows Phone, una plataforma que ya entonces buscaba diferenciarse con buenas ideas de productividad móvil.
Office Lens permitía fotografiar documentos, pizarras, notas manuscritas, recibos o tarjetas de visita y convertirlos en archivos digitales legibles, bien recortados y con corrección de perspectiva automática. Era simple, rápida y sorprendentemente precisa para la época.
Con el paso del tiempo, la aplicación dio el salto a Android y iOS y acabó rebautizándose como Microsoft Lens, perdiendo el apellido Office para reflejar una integración más amplia dentro del ecosistema de la compañía. Aun así, nunca dejó de estar muy ligada a herramientas como OneNote, OneDrive, Word, PowerPoint o Excel. Uno de sus grandes valores era precisamente esa facilidad para escanear algo en segundos y enviarlo directamente al formato o servicio que necesitabas, sin pasos intermedios ni fricciones.
Durante años, Microsoft Lens se consolidó como una de las mejores apps de escaneo disponibles en móvil. Era gratuita, no obligaba a pasar por caja, ofrecía un OCR muy solvente para extraer texto de imágenes y funcionaba tanto para estudiantes como para profesionales, periodistas o trabajadores que necesitaban digitalizar documentos sobre la marcha. No es casualidad que acumulase decenas de millones de descargas y valoraciones muy positivas en las tiendas de aplicaciones.
Una despedida por fascículos
El cierre no ha sido repentino. Microsoft anunció en agosto su intención de retirar la app de forma progresiva. Primero se retiró de los dispositivos iOS y Android y, finalmente, hoy se ha puesto el punto final a la creación de nuevos escaneos. El 25 de diciembre, día de Navidad, dejará de recibir soporte definitivamente.
Hasta el 25 de enero de 2026 se pueden seguir digitalizando documentos en la app, pero luego no se podrán crear. No obstante, los usuarios que después de esa fecha aún tengan la app instalada podrán acceder a los documentos guardados previamente, pero la función principal que daba sentido a Lens queda desactivada.
Según explica la propia compañía, la decisión responde a una estrategia de simplificación y concentración de funcionalidades. Microsoft quiere llevar muchas de las capacidades de escaneo y reconocimiento de texto al entorno de Microsoft 365 Copilot y a otras aplicaciones impulsadas por inteligencia artificial. Sobre el papel, tiene sentido unificar herramientas y apostar por soluciones más avanzadas, pero en la práctica la transición no es tan limpia como cabría esperar.
Por qué la echaremos de menos
Y ahí es donde llega el fastidio para muchos usuarios. Microsoft Lens era una app ligera, directa y sin complicaciones. No necesitabas pensar en suscripciones, ni en planes de pago, ni en flujos complejos. Abrías la aplicación, hacías una foto y listo. Parte de esa sencillez se diluye al trasladar estas funciones a entornos más grandes, más cargados de opciones y, en muchos casos, ligados a una cuenta de pago de Microsoft 365.
Además, no todas las funciones de Lens están replicadas de forma idéntica en las alternativas que propone la empresa de Redmond. Algunas integraciones directas, ciertos modos de escaneo o la facilidad para exportar documentos tal y como estaban desaparecen o requieren más pasos. Para quienes usaban Lens como una herramienta cotidiana, el cambio supone perder agilidad y tener que buscar soluciones externas para algo que ya estaba perfectamente resuelto.
El cierre de Microsoft Lens deja también una sensación agridulce: la de ver cómo una app madura, estable y muy bien valorada se sacrifica en favor de una estrategia más amplia centrada en la inteligencia artificial y los servicios de suscripción. Es el signo de los tiempos, pero no por ello resulta menos frustrante.
Hoy se apaga Microsoft Lens y con él una pequeña gran herramienta de productividad móvil. Para muchos usuarios no era solo un escáner en el bolsillo, sino una de esas apps que demostraban que, a veces, menos es más.
Alberto Payo
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