Aplicaciones para seguir la Huelga General del 14-N
Mañana, miércoles 14 de noviembre, España, Italia, Portugal, Chipre y Malta harán huelga general. Además, Francia, Grecia y la Bélgica francófona celebrarán manifestaciones de apoyo a los paros de sus vecinos. Plataformas sociales y sindicales de todo el continente denunciarán las políticas de austeridad impulsadas por la Comisión Europea para desmantelar el Estado del Bienestar en los países del viejo continente. Unas políticas que, en el caso español, inició el anterior Gobierno socialista e intensificó el actual, del PP.
Tal y como suele suceder en este tipo de jornadas, todas las miradas estarán centradas en una serie de indicadores que permitirán evaluar a lo largo del día el impacto de la huelga. Otra cosa es que sindicatos y Gobierno interpreten esos indicadores de forma completamente antagónica, pero eso también forma parte de la habitual batalla propagandística propia en este tipo de movilizaciones.
Sea como fuere, el principal indicador a tener en cuenta es el consumo eléctrico, al ser el que mejor refleja la paralización de los sectores estratégicos de la economía, como las industrias metalúrgica o automovilística. En este sentido, Red Eléctrica Española incluye en su web una aplicación para poder observar la curva de demanda energética en tiempo real desde cualquier dispositivo móvil.
Otra forma de medir el seguimiento de la huelga es observar la frecuencia de paso de los transportes públicos, cuyos trabajadores siempre han disfrutado de una capacidad de movilización mucho mayor que la de otros colectivos profesionales. En Madrid, por ejemplo, existe una app para Android que nos permitirá observar cómo están funcionando autobuses, Metro y Cercanías, y recientemente hablábamos aquí de las múltiples aplicaciones existentes para conocer los tiempos de espera de las redes de autobuses urbanos de las principales ciudades españolas.
Por la tarde llegará la hora de las multitudinarias manifestaciones en todas las ciudades españolas, y con ellas el habitual estallido en las redes sociales. En ese momento, Twitter y Facebook serán las herramientas más utilizadas para informar del transcurso, las consignas y cualquier otra incidencia relacionada con las marchas, que, esperemos, no deriven en violentas actuaciones policiales como las del 25-S, lo que provocaría la irrupción de YouTube y sus vídeos-denuncia.
Además, los manifestantes más rezagados podrán recurrir a cualquiera de las múltiples apps de geolocalización existentes para encontrarse con sus compañeros y gritar juntos contra las agresiones de los políticos y los banqueros a los derechos de los trabajadores.
En cualquier caso, tal vez sea un contrasentido abusar de este tipo de herramientas durante un día de huelga general. Al fin y al cabo, lo que se demuestra en este tipo de jornadas es la capacidad de los trabajadores para cambiar la cómoda denuncia en la barra del bar o en el sofá, a través de Internet, por una lucha activa, que históricamente es la que ha provocado los cambios de rumbo en las políticas gubernamentales injustas –obsérvese, sin ir más lejos, el tema de los desahucios–.
Además, la huelga general va acompañada de una huelga de consumo, lo que implica utilizar la mínima cantidad de electricidad y agua, no ir al médico a no ser que sea estrictamente necesario, no llevar a los hijos al colegio, no usar tarjetas ni ningún transporte si no es imprescindible, no comprar en grandes almacenes, centros comerciales, peluquerías, supermercados, bancos ni gasolineras y evitar el consumo telefónico. En este punto vuelven a jugar un papel esencial las apps, fundamentalmente las de mensajería, que nos permiten comunicarnos sin necesidad de llamar o enviar SMS. De hecho, sindicatos como CGT han señalado que informarán de lo que vaya aconteciendo vía Twitter, mediante la etiqueta @14NCGTHUELGA.
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